Me lo recomendaron, pues no había forma de perder peso. Pasé por manos de varios endocrinos y todos ellos me dieron por caso perdido. Acudí a él casi arrastrada y por desesperación, pero sin mucha fe. Las dos primeras semanas no bajé peso, pero él me animó a seguir y a confiar en su trabajo y al final dio con la tecla, llevó más de 15 kilos perdidos y estoy encantada, sólo puedo darle las gracias.

He hecho miles de dietas y siempre abandoné porque nadie me entendía. Es la primera vez que me escuchan y me ayudan, la primera que no me ponen simplemente una dieta. Me ha enseñado a comer, a encontrar motivaciones para permanecer delgada y me ha ayudado a cambiar mis hábitos de vida. Como dice él, como de todo, pero ahora sé como me lo debo de comer. Gracias.